empezamos el dia con esta picea, Oyakata me ha contado que son muy caras en japón, por eso no están de moda, que un esqueje de nada puede costar unos 90 euros
despues me ha dicho long thinking, osea que dedicara mucho tiempo a buscar el diseño, y cuando se iba me dice, 10 minutos…¿y eso es mucho tiempo?
yo he escogido un diseño, un frente similar pero con el movimiento hacia la derecha, pero quería torsionar una rama fuerte y me dijo que no era posible, es la primera que trabajo y no las controlo mucho, si fuese un silvestris no hubiese tenido ningùn problema, en esta foto ya se había suprimido una rama que no entraba en ningún diseño, era muy larga y solo tenía verde en la punta
este es el diseño de oyakata
las primeras ramas colocadas, mi diseño era parecido, un poco girado hacia la derecha y con la rama enrafiada que ahora está a la izquierda a la derecha, decía que no se podia mover, pero finalmente le hemos metido un viaje de tres pares
hoy hemos vuelto a comer en el Italiano, es mucho de pitiminí, pero da gusto, sabores conocidos por fin
esto era como había dejado yo la picea
este es el lateral
y esto es después de la colocación de Oyakata, ha levantado más el ápice y recolocado algunas ramitas
después he pinzado este tosho, increible como ha evolucionado después del transplante
y este también, que lata dan
después he empezado a meterle mano a este prunus
ha llegado el dueño y ha sido una situación un poco violenta, así que lo he dejado a medias
y he ayudado a Asanuma a hacer algunos trabajos en los árboles que ha comprado ayer, este árbol está alambrado por un profesional¡es la prueba de que no todos los japos son buenos!
este rígida necesitaba algun trabajillo
como era San Juan hemos hecho una cenita “especial”